No tengo tiempo para pensar, solo necesito ahogarme de escenas repetitivas y cargadas de estupidez. Porque en cada momento en el que llego a sumergirme, meticulosamente una punzadita vuelve a destruir una y otra vez los tejidos de una herida. Porque cada vez que me soplan por la espalda se que estas vos.
Nada es tan difícil como parece, cuando las cosas pasan duelen de manera indecible, incalculable, inimaginable, y de todas esas palabras hasta incontables. Volví a creer que en la felicidad podía ahogar la tristeza, pero mentira, una se alimenta de la otra y sin esa simbiosis nada es neutral.
Cuesta despertarse, cuesta dormirse, cuesta recuperarse, cuesta imaginarse, cuesta hasta dormir y soñar, cuesta hasta soñarse dormido....Pero nada es tan difícil como parece!
Creo que vivir guardando los miserables dolores en cajones para que nadie los encuentre es es secreto de la vida.
Si!, acabo de confesarlo, no hay mejor manera de superar algo que pensaba que era insuperable, que levantándose por las mañana entre pensamientos extraños y encaprichados, vestirse de colores, perfumarse con deliciosas fragancias, maquillarse los ojos con delineadores y mascaras para pestañas. Un poco de labial por aquí, un poco de rubor por allá, color en los cachetes! y listo! .Esa es la formula secreta con la que uno puede pintarse una sonrisa y ser feliz.
Porque así, entre tanto color, fragancia y sonrisa, es como se esconden los golpes mas duros de la vida, y cuando uno logra cargarse de escenas estúpidas, es cuando por fin llego la hora, como dice Fito, de pararse al lado del camino y fumarse el humo mientras todo pasa...
